Pese a los días de lluvia y el frío de la región, los suscriptores disfrutaron de uno de los destinos más clásicos del Club del Suscriptor: Alsacia y Selva Negra.
Mita Estarellas, del Club, y Nuria, la guía, fueron quienes acompañaron al grupo durante el viaje que se convocó para el pasado puente de la Constitución. Mita nos trasladó sus sensaciones del viaje, y bien se podrían resumir en dos aspectos: por un lado, la cohesión de grupo: «los suscriptores son fantásticos, hicieron que el viaje fuera divertido y agradable...»; y por otro lado, los lugares de la ruta: «son paisajes diferentes a lo que conocemos aquí, la arquitectura y el ambiente tan navideño no nos dejaron indiferentes, nos gustó todo y disfrutamos mucho», asegura Mita.
Destacar que el hospedaje marcó la diferencia, se trataba de un hotel familiar ubicado en plena naturaleza, lo que daba mucho valor a la estancia. El hotel se llamaba Verena’s Park Hotel; recibía el nombre de su dueña, Verena, quien estuvo muy pendiente de las necesidades del grupo y al que regaló más de una sorpresa: «por ejemplo, una de las noches nos organizó una barbacoa con comida típica al aire libre, acompañado de vino caliente; y otra noche nos sorprendió con Papá Noel y Krampus», éste último es una figura que ‘castiga a los niños desobedientes durante el año’, lo que para nosotros sería el carbón.
El itinerario
El día 6 pusieron rumbo a Stuttgart donde, tras hospedarse, disfrutaron del alojamiento. Al día siguiente se dirigieron al pueblo medieval de Stein am Rhein, uno de los más típicos y mejor conservados de Suiza. Tras esta preciosa visita fueron a Selva Negra, parando en las cataratas del Rhin.
También conocieron las poblaciones de Freiburg y Titisee, así como diferentes mercados navideños. En Titisee, además, descubrieron más secretos sobre el reloj de cuco, ya que es a esta población a la que se le atribuye este invento.
El penúltimo día realizaron una ruta ‘navideña’ por Alsacia, con la visita de Riquewihr hasta llegar a Colmar, donde retrocedieron en el tiempo por su arquitectura, ambiente y mercado navideño.
El día 9 lo pasaron en Triberg, una animada población en medio de cascadas y parques; descubrieron el nacimiento del Danubio y, posteriormente, visitaron la pequeña población de Schiltach, la joya desconocida de la Selva Negra. El final del día llegó con el traslado al aeropuerto.